¿Es obligatorio llevar rueda de repuesto o kit repara pinchazos?

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¿Es obligatorio llevar rueda de repuesto? ¿Con el kit repara pinchazos es suficiente? ¿Qué otras alternativas podemos encontrar? Las ruedas son uno de los elementos fundamentales del automóvil para garantizar la total seguridad. Ellas son las que nos conectan con la superficie y las que, por tanto, reciben un mayor impacto y desgaste. De ahí que sea necesaria una revisión exhaustiva de forma habitual, controlando que se encuentren en estado óptimo. Sin embargo, aun estando en perfectas condiciones, pueden sufrir un pinchazo o, todavía peor, un reventón. 

Aunque la ley no nos obliga a llevar una rueda de repuesto, sí nos exige que incluyamos cualquier otro método de reparación, aunque sea temporal, para evitar los inconvenientes que puedan derivarse de esta situación. En este artículo, resolveremos tus dudas y profundizaremos sobre este tema. Sigue leyendo.


Rueda de repuesto: ventajas e inconvenientes

rueda de repuesto o kit repara pinchazos

Aunque la normativa no nos exige llevar una rueda de repuesto, es importante que valoremos sus ventajas, y también inconvenientes, para que la elección sea la más adecuada.

Ventajas de la rueda de repuesto

  • Seguridad y tranquilidad. Contar con una rueda de repuesto puede brindar una sensación de seguridad y tranquilidad a los conductores. Saber que tienen la capacidad de reemplazar la rueda dañada en cualquier momento y lugar les permite enfrentar imprevistos sin depender de servicios de asistencia en carretera.
  • Solución para otros problemas. La rueda de repuesto no sólo es útil en caso de pinchazos, también puede ser un salvavidas en situaciones de daños en los neumáticos debido a golpes o impactos. 

Inconvenientes de la rueda de repuesto

  • Espacio y peso. Una rueda de repuesto, especialmente aquellas de tamaño completo, ocupa una cantidad significativa de espacio en el maletero. Además, su peso adicional puede afectar al consumo de combustible a largo plazo.
  • Falta de conocimiento y habilidad. No todos los conductores saben cómo cambiar la rueda de repuesto de manera segura y efectiva. Esto puede llevar a situaciones peligrosas, mucho más cuando esta acción se produce en carretera.

¿Es obligatorio llevar una rueda de repuesto? Lo que dice la normativa

Durante décadas, la rueda de repuesto ha sido un elemento fundamental en cualquier vehículo. De esta forma, los conductores se sentían más seguros y tranquilos, sabiendo que contaban con la solución inmediata en el caso de un pinchazo. Sin embargo, a medida que los fabricantes crean nuevas formas y diseños en los que buscan la ligereza a la vez que la amplitud en el espacio, la presencia de la rueda de repuesto ha comenzado a disminuir en la mayoría de modelos.

Hace algunos años que la DGT anuló la obligatoriedad de llevar una rueda de repuesto en el coche. Sin embargo, sí resulta obligado llevar cualquier sistema con el que reparar o sustituir la rueda en caso de que fuera necesario. Así lo especifica en el Reglamento General de Vehículo anexo XII: «una rueda completa de repuesto o una rueda de uso temporal, con las herramientas necesarias para el cambio de ruedas, o un sistema alternativo al cambio de las mismas que ofrezca suficientes garantías para la movilidad del vehículo». 

De ahí podemos deducir que, aunque no es obligatorio llevar la rueda de repuesto como tal, sí lo es llevar cualquiera de los sistemas de reparación que pueden salvarte de esta situación, al menos para poder circular hasta llegar a un taller mecánico profesional. De no ser así, te arriesgas a recibir una sanción económica de 200 euros.


El kit repara pinchazos, la alternativa más cómoda

¿Es obligatorio llevar rueda de repuesto o kit repara pinchazos?

En respuesta a las limitaciones de las ruedas de repuesto, los fabricantes han desarrollado otras alternativas. Algunas de ellas:

  • Rueda de «galleta». Su tamaño es más reducido que la rueda habitual y nos puede salvar en caso de emergencia. Eso sí, no se puede circular a más de 80 km/h y no más allá de 200 kilómetros.
  • Neumáticos «run-flat». Es un tipo de ruedas especiales que contienen un sistema interior que protege la llanta ante un pinchazo. Esto permite circular hasta 80 kilómetros y a una velocidad máxima de 80 Km/h, aunque la rueda esté pinchada. 

Sin embargo, la opción más cómoda, gracias a sus importantes ventajas, es el kit repara pinchazos. Es cierto que no es la más recomendable y eficaz, pero puede salvarte de una urgencia de forma sencilla y rápida, además de librarte de una multa. No olvides que, si no llevas rueda de repuesto, estás obligado a llevar cualquiera de las otras soluciones mencionadas.

Estos kits están compuestos por un spray y un compresor que inyecta, a través de la válvula, una espuma que sella la zona afectada. Después, será necesaria hincharla de nuevo para poder seguir circulando. De igual modo que en los casos anteriores, no se trata de una solución definitiva, por lo que es necesario recurrir a un taller especializado a la mayor brevedad. 

Entre las ventajas que aporta el kit repara pinchazos destacan el poco espacio que ocupa y la sencillez de su uso. En cuanto a los inconvenientes, incidimos en que resulta una solución temporal y que no todos los problemas pueden ser solucionados, especialmente si el daño al neumático es demasiado extenso.

En definitiva, la decisión de llevar o no rueda de repuesto recae en el conductor y en la seguridad que le ofrezca esta alternativa. Si quieres prescindir de ella, sí debes tener en cuenta la obligatoriedad de llevar cualquier otra opción de reparación. Solo en el caso de los vehículos dedicados a transporte de personas o mercancías de más de 3.500 kilos, no están obligados a llevar este tipo de soluciones

Desde Driveris, especialistas en automóviles de ocasión y segunda mano, te recordamos que no llevar ningún sistema de reparación o sustitución ante un pinchazo o reventón puede suponer una multa de hasta 200 euros, además del grave inconveniente que supone tanto para ti como para el resto de la circulación. La elección entre ellos dependerá de tus necesidades individuales. Lo más importante es estar preparado siempre para poder afrontar cualquier situación que limite el disfrute del viaje.

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